La manera en la que conduces tu auto podría estar afectando seriamente las partes del mismo que están involucradas, como el correcto funcionamiento de la bomba de inyección.
Cuando conducimos con la reserva de la gasolina en el auto, afectamos el buen funcionamiento del vehículo y la razón es que la bomba de combustible, se encarga de succionarla para que llegue hasta los inyectores.
Los automóviles con inyección electrónica sufren más desgaste
Al estar la bomba sumergida en el tanque de gasolina, el nivel de combustible debe de ser suficiente para garantizar su correcta lubricación y enfriamiento, es por ello que no es conveniente dejar que el auto se quede en la reserva y sacarlo así a la calle, ya que en los últimos litros de combustible se acumulan impurezas que pueden ir directamente al motor y causar problemas.
Toma en cuenta que cuando queda poca cantidad de carburante, la bomba de gasolina trabaja al máximo y por ello podría quemarse.
Lo que no ves
Al dejarla a la intemperie por la falta de gasolina, el aire se puede colar en el circuito, lo que perjudica la refrigeración a la vez que empobrece la mezcla de aire y combustible.
Además de lo anterior, un filtro obstruido puede afectar al rendimiento del motor y provocar un incremento del consumo de combustible. Un síntoma de que este elemento está sucio es la dificultad en el arranque del vehículo, principalmente en frío.
Lo más recomendable cuando ya hay indicios de problemas, es acudir a una estación de servicio a rellenar el tanque de combustible del coche cuando el testigo del nivel del mismo se encienda, avisándonos que estamos por iniciar a consumir la reserva. Es importante que sepas que cada coche es distinto y por ende, no en todos los autos es igual la cantidad de gasolina que requiere preservar en la reserva.